¿Qué es el CIF o código de identificación fiscal y para qué sirve?
El CIF o Código de Identificación Fiscal es una herramienta imprescindible a la hora de identificar a las empresas. Sin embargo, hay muchos matices que lo definen, así como diferentes aspectos a tener en cuenta al compararlo con los NIF.
Índice:
- ¿Qué es el CIF de una empresa?
- ¿Para qué sirve el número de identificación fiscal de una empresa?
- ¿Cómo puedo saber el CIF de una empresa?
- Diferencia entre NIF y CIF
¿Qué es el CIF de una empresa?
El CIF o Código de Identificación Fiscal era una clave alfanumérica formada por una letra y ocho dígitos (por ejemplo, A12345678) cuya función era facilitar la identificación a empresas. Sin embargo, con la entrada en vigor del Real Decreto 1065/2007, quedó en desuso y pasó a denominarse NIF o Número de Identificación Fiscal. Conviene recordar que esta figura ya existía previamente, pero solo era utilizada para la identificación de personas físicas, es decir, de particulares.
¿Para qué sirve el número de identificación fiscal de una empresa?
El objetivo del NIF es permitir a la Agencia Tributaria, a la Seguridad Social o a cualquier otra entidad pública o privada identificar a una empresa concreta. Este código aporta mucha más información de lo que la mayoría de personas pueda pensar.
La letra que se sitúa en primer lugar muestra la forma jurídica de la empresa en cuestión:
- A: sociedades anónimas
- B: sociedades limitadas.
- C: sociedades colectivas.
- D: sociedades comanditarias.
- E: comunidades de bienes.
- F: cooperativas.
- G: asociaciones en general.
- H: comunidades de propietarios según la ley de propiedad horizontal.
- J: sociedades civiles (con o sin personalidad jurídica).
- N: entidades no residentes.
- P: corporaciones locales.
- Q: organismos públicos en general.
- R: instituciones religiosas.
- S: órganos de la administración del Estado y de las comunidades autónomas.
- U: uniones temporales de empresas.
- V: empresas no pertenecientes a las categorías anteriores.
- W: entidades permanentes que no residen en España.
Ahora bien, los siguientes dos dígitos corresponden a la comunidad autónoma en la que tiene su sede la empresa. Se ordenan por orden alfabético, con la excepción de Ceuta y Melilla:
- 01: Andalucía.
- 02: Aragón.
- 03: Asturias.
- 04: Baleares.
- 05: Canarias.
- 06: Cantabria.
- 07: Castilla y León.
- 08: Castilla-La Mancha.
- 09: Cataluña.
- 10: Comunidad Valenciana.
- 11: Extremadura.
- 12: Galicia.
- 13: Madrid.
- 14: Murcia.
- 15: Navarra.
- 16: País Vasco.
- 17: La Rioja.
- 18: Ceuta y Melilla.
Esto antes no era así, ya que el CIF mostraba un código de dos dígitos que hacía referencia a la provincia en la que la sociedad tenía su sede social:
- 00: No residente.
- 01: Álava.
- 02: Albacete.
- 03: Alicante.
- 04: Almería.
- 05: Ávila.
- 06: Badajoz.
- 07 y 57: Islas Baleares.
- 08 y 58, 59, 60, 61, 62, 63, 64, 65, 66, 68: Barcelona.
- 09: Burgos.
- 10: Cáceres.
- 11 y 72: Cádiz.
- 12: Castellón.
- 13: Ciudad Real.
- 14 y 56: Córdoba.
- 15 y 70: A Coruña.
- 16: Cuenca.
- 17, 55 y 67: Girona.
- 18: Granada.
- 19: Guadalajara.
- 20 y 71: Guipúzcoa.
- 21: Huelva.
- 22: Huesca.
- 23: Jaén.
- 24: León.
- 25: Lleida.
- 26: La Rioja.
- 27: Lugo.
- 28, 78, 79, 80, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 88: Madrid.
- 29, 92, 93: Málaga.
- 30 y 73: Murcia.
- 31: Navarra.
- 32: Ourense.
- 33, 74: Principado de Asturias.
- 34: Palencia.
- 35, 75: Las Palmas.
- 36, 94: Pontevedra.
- 37: Salamanca.
- 38, 76: Santa Cruz de Tenerife.
- 39: Cantabria.
- 40: Segovia.
- 41, 90, 91: Sevilla.
- 42: Soria.
- 43, 77: Tarragona.
- 44: Teruel.
- 45: Toledo.
- 46, 96, 97, 98: Valencia.
- 47: Valladolid.
- 48, 95: Vizcaya.
- 49: Zamora.
- 50, 99: Zaragoza.
- 51: Ceuta.
- 52: Melilla.
Por su parte, los siguientes cinco dígitos son asignados en función del orden de inscripción de la empresa en el Registro Mercantil de su comunidad autónoma. Finalmente, la última letra o número es un dígito de control que permite validar el NIF, una función idéntica a la que tenía en el CIF.
¿Cómo puedo saber el CIF de una empresa?
El CIF de la empresa debe aparecer en cualquier factura que emite, por lo que en este tipo de documentos se puede encontrar sin ninguna dificultad. Sin embargo, si no se va a comprar nada ni se va a contratar un servicio, una buena alternativa es solicitarlo directamente al empresario o a cualquiera de sus empleados.
De todas formas el CIF de las empresas es una información pública que la mayoría de ellas suelen publicar en sus páginas web. Por ello, suele ser suficiente con navegar en ellas o, simplemente, escribir su nombre en Google para poder encontrarlo. También hay páginas especializadas en recopilar este tipo de información.
Diferencia entre NIF y CIF
Antes de 2008, el CIF era el código utilizado para identificar empresas (personas jurídicas), mientras que el NIF era el empleado para identificar a particulares (personas físicas). Sin embargo, desde la entrada en vigor del Real Decreto 1065/2007, que supuso la derogación del CIF y su sustitución por el NIF, ambas claves se han unificado y tienen la misma función.
Eso sí, hay algunas peculiaridades. Por ejemplo, los NIF de las personas físicas son idénticos a sus DNI (Documento Nacional de Identidad), por lo que están formados por ocho dígitos numéricos y una letra al final. Este formato también es el que poseen los CIF de los trabajadores autónomos.
Sin embargo, los NIF de las empresas son diferentes, ya que poseen una letra al principio del código. De este modo, resulta muy sencillo diferenciar si se trata de una sociedad o de una persona física o trabajador por cuenta propia. También se han simplificado los dígitos de localización, que ahora hacen referencia a la comunidad autónoma y no a las provincias.
La información aportada por los NIF es clave tanto para los organismos públicos encargados de controlar la gestión y tributación de las empresas como para los usuarios particulares, que a través de él pueden identificar a las compañías y gozar de una mayor seguridad al operar con ellas.
