Métodos de pago: cuáles hay y cuáles ofrecer en tu e-commerce

La elección de un método de pago u otro es uno de los aspectos más relevantes en la creación de una tienda online o un establecimiento con comercio electrónico, al mismo nivel que la calidad de un producto o la estética de la propia página web. De hecho, tiene consecuencias en la facturación de la empresa, hasta el punto de ser el hecho diferencial para que se realice o no una compra.

Por eso, a la hora de ofrecer uno u otro sistema de pago en tu e-commerce, debes tener en cuenta una serie de aspectos para que no suponga un obstáculo a la hora de cerrar una venta. El último Estudio método de pago en e-commerce, elaborado por Palbin, ha revelado cuáles son los métodos de pago más relevantes y utilizados, así como su incidencia en la facturación y su eficacia para finalizar cualquier proceso de compra.

¿Qué métodos de pago hay para e-commerce?

Las pasarelas de pagos

En la actualidad, es el método por excelencia para comprar por internet. Es un servicio que la mayoría de establecimientos de comercio electrónico tienen implementado gracias a su sencillez y rapidez.

A través de una pasarela de pagos, el comprador utiliza su número de tarjeta de crédito o débito, que navegan cifrados a la tienda donde se ha comprado a través de un sistema SSL o TLS. La pasarela de pagos, a su vez, contacta con la plataforma del banco del vendedor y le envía los datos de la tarjeta. 

En ese momento, la entidad bancaria valida que la información sea correcta y autoriza la transacción. En caso de que haya falta de fondos en la cuenta vinculada con la tarjeta o se produzca cualquier error, la transacción no se completa. En la actualidad, este proceso que parece tan complejo se realiza en unos pocos segundos hasta que el banco emite un mensaje aprobando o rechazando la operación.

En la actualidad, hasta el 80% de las tiendas online permiten abonar el precio a través de una pasarela de pago. Al mismo tiempo, es uno de los sistemas más rentables para los comercios, ya que supone el 65% de la facturación real.

En esta pasarela de pagos se incluye tanto el abono de la cuantía con tarjetas bancarias de forma directa, como las compras que se realizan de forma indirecta a través de plataformas como Google Pay, Amazon Pay o Apple Pay, entre muchos otros.

Paypal

Es uno de los gigantes de los pagos online. Nacida en 1998, Paypal está instalada en el 70,3% de las tiendas, y es el segundo método más utilizado en España tan solo por detrás de las pasarelas de pago. Sin embargo, tan solo gestiona hasta el 10,9% de su facturación, fundamentalmente debido a sus elevadas comisiones y su escaso uso por parte de los clientes.

Su principal ventaja es que es un sistema que se activa en tan solo unos minutos. Además, garantiza la privacidad de la información, ya que no es necesario proporcionar ningún tipo de dato sobre las tarjetas de crédito o débito asociadas a las cuentas.

Contrareembolso

Es el tipo de pago más antiguo. Se ha utilizado tradicionalmente para abonar los envíos de paquetería, especialmente cuando los métodos electrónicos no estaban tan desarrollados como en la actualidad. Su funcionamiento es sencillo: el cliente únicamente paga la compra cuando se la entrega el mensajero. 

Está cada vez más en desuso, ya que ha sido sustituido de forma paulatina por otros medios de pago electrónicos. Sin embargo, todavía sigue contando con cierta relevancia, ya que hasta 1 de cada 4 comercios online lo permiten y supone un 8% de la facturación de las tiendas.

Transferencia bancaria

Junto con el contrareembolso, es otro de los métodos de pago más antiguos. Al mismo tiempo, es uno de los más utilizados, ya que el 63% de las tiendas lo tienen implementado, aunque solo representa el 13% de la facturación de las empresas de comercio electrónico.

A pesar de su acogida, la transferencia bancaria cuenta con una serie de desventajas, como el hecho de que el usuario no sepa si ha sido aceptada en el momento del pago. No obstante, el volumen de compradores que todavía lo utilizan es lo suficientemente elevado como para descartarlo en tu empresa.

Financiación

Las tiendas online han comenzado a introducir la financiación online para facilitar las compras a través de sus plataformas. Es una opción que tiene cada vez más relevancia, gracias a las posibilidades que dan los nuevos servicios financieros y las alternativas que ofrece el pago aplazado. Está orientado a compras de mayor cuantía, ya que el pedido medio de este método es de 429 euros.

No obstante, por el momento no tiene todavía demasiada acogida porque aún exige que el cliente aporte una serie de datos y acepte las condiciones de financiación, a lo que hay que añadir el sobrecoste que supone el tipo de interés. Por todas estas razones, muchos clientes aún no cierran sus compras online con pago aplazado.

Bizum

A pesar de que es un sistema principalmente empleado entre particulares, Bizum también ha revolucionado los pagos en el e-commerce. La plataforma ya suma 16 millones de usuarios en España, y cada vez son más las tiendas que permiten el pago a través de esta opción, aunque todavía suponen un porcentaje muy residual, del 5%.

Las pasarelas de pago que actualmente aceptan Bizum para empresas son PrestaShop, WooCommerce, Magento, Oscommerce, Opencart, VirtueMart y Zencart. Su principal ventaja es que no tiene ningún tipo de coste para sus usuarios.

La importancia de elegir un buen método de pago para tu e-commerce

Si un cliente no lleva efectivo encima y un establecimiento no permite el pago con tarjeta, se acaba marchando de la tienda sin comprar, y todo el esfuerzo realizado por tener un buen escaparate y un producto de calidad acaba cayendo en saco roto.

Parece una historia propia de las tiendas físicas, pero el mundo online no es muy diferente. Si un cliente no encuentra la plataforma segura, tiene que pagar un sobrecoste por la compra o dar más datos de la cuenta, es muy probable que el proceso de venta no se complete.

Por eso, es importante tener en cuenta varios aspectos a la hora de elegir un buen sistema de pago para tu e-commerce:

• Que sea un método seguro. Entre los requisitos de seguridad más conocidos para realizar pagos están los certificados de seguridad SSL, los Sistemas de Verificación de Dirección (AVS), además de las normas de seguridad reguladas por la Industria de las Tarjetas de Pago (PCI).
• Que sea de uso frecuente y generalizado. Cuantos más usuarios lo utilicen, más probabilidad habrá de que se pueda pagar con ellos.
• Que no suponga un sobrecoste para el usuario, ya que los consumidores no desearán asumir un cargo extraordinario por la compra de ese producto.
• Que sea rápido, intuitivo y no exija tener que proporcionar más datos de la cuenta.

En resumidas cuentas, el objetivo de cualquier método de pago utilizado en el e-commerce es que facilite la finalización del proceso de compra. Por eso, es importante realizar un buen análisis previo para identificar los que mejor se ajusten a tu negocio.