Cómo ahorrar con la nueva factura de la luz
Ahorrar haciendo uso de la nueva factura de la luz será posible gracias a las medidas introducidas en la propuesta del Ministerio. Entre ellas destacarán aquellas dirigidas al ahorro, así como datos objetivos como el precio de la electricidad o las actuales rebajas fiscales que ya reducen tu factura. En la siguiente infografía damos algunos consejos de ahorro con la nueva factura.
Índice
- ¿Qué cambios conlleva la nueva factura de la luz?
- ¿Cómo ahorrar con la nueva factura de la luz en 2023?
- Elegir la tarifa de la luz más adecuadas
¿Qué cambios conlleva la nueva factura de la luz?
La nueva factura de la luz propuesta por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico lleva una serie de ventajas tarifarias para los contratos PVPC, así como modificaciones informativas orientadas a que los consumidores dispongan de más herramientas para comparar consumos y elegir su tarifa. Más información sobre los cambios de la nueva factura de la luz.
¿Cómo ahorrar con la nueva factura de la luz en 2023?
Si bien es cierto que la nueva factura de la luz no pone el foco en el ahorro energético ni en el precio, aunque sí en la reducción de la volatilidad y, por tanto, en tranquilidad personal-profesional, hay varios mecanismos que ayudarán al ahorro:
- Consumo medio por código postal. Particularmente útil para familias pero también para microempresas y trabajadores autónomos en casa, el consumo medio de la zona ayudará a ser más conscientes de nuestro gasto actual, así como concienciar sobre el ahorro.
- Mecanismo ibérico. En la factura aparecerá reflejado el efecto abaratador del ‘mecanismo ibérico‘ para limitar el precio del gas y rebajar así el precio de la electricidad para la Península Ibérica (España más Portugal).
- Rebajas fiscales en vigor. También aparecerán las ventajas fiscales de las que se aprovecha el contrato en cuestión, de forma que podamos calcular, como empresa o autónomo, el beneficio dispuesto por evitar un gasto.
- Consejos de ahorro energético. En la sección ‘m’ de la factura habrá un espacio para consejos de ahorro energético que será de interés para aquellas personas que busquen tips o trucos para reducir aún más el coste final del consumo eléctrico.
Elegir la tarifa de la luz más adecuadas
La mejor forma de elegir la tarifa de la luz más conveniente para ti, tu actividad laboral o tu empresa es hacer uso del comparador de la CNMC. Si la factura dispone de QR se aconseja escanearlo directamente porque ya dispondrá de los datos de la factura, aunque también pueden integrarse de forma manual.
Una vez introducida la información en el comparador, la CNMC aportará una lista de tarifas ordenadas por conveniencia, no necesariamente económica. Por ejemplo, se puede filtrar por tipo de energía (verde o no), servicios adicionales o penalización. En líneas generales, la PVPC regulada suele ser la más asequible a largo plazo. La OCU dispone de un comparador de tarifas que merece la pena visitar con los datos del último año en la mano, así como un portal en el que suele publicar las «mejores tarifas de electricidad«, aunque este último no tiene por qué dar resultados orientados a un contrato específico. No hay dos consumos iguales.
¿Qué es más barato, tarifa regulada o libre? ¿Tarifa variable o fija?
Con el objetivo de ahorrar en la factura de la luz, la gran pregunta es si merece o no pasarse a la tarifa regulada o si, por el contrario, optar por la tarifa libre. Para elegir de forma informada, lo mejor es comprender cuáles son sus características.
¿Cuándo consumes la energía?
La tarifa regulada siempre tendrá tres tramos con horas valle, horas llano y horas punta, es decir, variable, con la estructura que sigue. Es posible que la tarifa libre también las tenga, aunque no es obligatorio.
0 a 8 horas, valle. 8 a 10 horas, llano. 10 a 14 horas, punta. 14 a 18 horas, llano. 18 a 22 horas, punta. 22 a 24 horas, llano. Los fines de semana siempre valle a todas horas.
La tarifa regulada resultará particularmente conveniente cuando se concentre el consumo eléctrico en las horas valle o al menos las horas llano, y tiende a penalizar las horas punta.
Una persona que teletrabaje y pueda elegir el horario de su jornada laboral, evitando los picos o consumiendo el grueso de la energía en llano más valle, le convendrá la regulada.
Ofertas de precio fijo
En el mercado no regulado o libre hay ofertas comerciales que pueden resultar interesantes para ahorrar, tales como un precio fijo por la energía anual, sin importar el momento de consumo.
Para saber si resulta conveniente, una forma es calcular cuánto costó el kWh y kW·día el año anterior, usando las facturas de los últimos 12 meses, y compararlos con cuánto se abonará el año con los precios fijos bajo el mismo consumo.
Electricidad y gas
Si la vivienda u oficina no está completamente electrificada, por ejemplo porque haya caldera en lugar de termo o caldera en lugar de aerotermia, la comparación se convierte en un verdadero reto porque no es lo mismo un kWh eléctrico que un kWh de gas o combustible.
El elemento común para comparar son los euros de la oferta comercial de la comercializadora a la que se pida presupuesto, poniendo especial cuidado en gastos ‘ocultos’, en la duración del contrato y los costes de su cancelación, o el precio fijado para el segundo año.
Servicios adicionales
A veces el ahorro viene en pack, integrando servicios adicionales ofrecidos por las comercializadoras como, por ejemplo, mantenimiento y seguros. Sin embargo, conviene poner el foco en si ya se tienen contratados esos servicios dentro de otro producto como pueda ser el seguro de la vivienda, para evitar duplicidades.