Economía circular: ¿qué es y qué modelo puede implementar mi empresa?
En un mundo donde los estándares de vida se van sofisticando y la economía global se extiende cada vez más, el modelo de producción y consumo ha crecido exponencialmente en el último siglo.
Sin embargo, esta forma en la que vivimos no es sostenible, como apuntan muchos expertos. El sistema económico hasta ahora no tiene en cuenta su vinculación con los recursos que nos da la naturaleza y nuestro planeta no puede regenerarse a tiempo con este ritmo de producción.
Un ejemplo de esto es que el 28 de julio de 2022, la humanidad terminó de consumir todos los recursos naturales y biológicos que el planeta es capaz de regenerar en un año: a partir de entonces, vivimos de prestado el resto del año, utilizando un 60% más de recursos de lo que la Tierra nos puede ofrecer. Por si esto fuera poco, además, desechamos más de 2 500 millones de toneladas de residuos al año.
Con todas estas cartas sobre la mesa, está claro que ha llegado el momento de cambiar. Para redefinir la forma en la que producimos, pero también en la que consumimos, la economía circular es el único camino a un mundo con un ambicioso objetivo: alcanzar un horizonte de cero residuos el día de mañana.
Índice:
- ¿Qué es la economía circular? Definición del concepto
- ¿Cómo funciona la economía circular? Objetivos
- ¿Cuáles son las diferencias entre los modelos circulares y los lineales?
- Principios de la economía circular
- ¿Qué beneficios tiene la economía circular?
- ¿Por qué es importante cambiar a una economía circular en las empresas?
- Primeros pasos para adaptar tu empresa a un modelo circular
- Modelos de negocio circulares que puedes implementar en tu empresa
¿Qué es la economía circular? Definición del concepto
La economía circular actúa como un marco de soluciones que trata de dar respuesta a desafíos globales actuales como el cambio climático, la pérdida de diversidad, la generación de residuos y la contaminación.
Para ello, revisa el modelo productivo que se ocupa de que el ciclo de vida de los materiales, los productos y los servicios sea lo más largo posible. Así, con la reutilización de los materiales que ya hemos extraído y los productos que ya hemos fabricado, todos salimos ganando.
Lejos de ceñirse únicamente a la elaboración y la confección de los artículos, la economía circular comienza desde el plano más conceptual y se desarrolla, además, teniendo en cuenta factores ambientales, sociales y económicos.
¿Cómo funciona la economía circular? Objetivos
El Parlamento Europeo define el funcionamiento de este modelo como una forma de compartir, prestar, reutilizar, reparar, reacondicionar y reciclar los recursos, de forma que puedan ser usados una y otra vez.
Para ello, el sistema cuenta con los siguientes objetivos:
- Llevar a cabo un diseño que tenga en consideración todo el impacto medioambiental de un producto.
- Promover un uso eficiente de los materiales, tanto nuevos como reciclados.
- Reutilizar partes o residuos enteros para la elaboración de nuevos productos.
- Reparar aquellos productos que estén estropeados.
- Reciclar aquellos materiales que puedan ser tratados.
- Valorizar y dar un aprovechamiento energético a aquellos residuos que ya no se puedan reciclar más.
¿Cuáles son las diferencias entre los modelos circulares y los lineales?
La economía circular surge en oposición al modelo lineal, la forma tradicional que hemos tenido de consumir hasta prácticamente la actualidad.
Este modelo lineal está basado en la concepción nada sostenible de “usar y tirar”, por lo que todo lo que extraemos y fabricamos es desechado una vez lo hemos consumido, sin darle una segunda vida ni reutilizar sus componentes. Se trata de un modelo muy contaminante y poco eficiente que desafía frontalmente los límites de abastecimiento de recursos del planeta.
Por el contrario, la economía circular trata de imitar a la naturaleza en la que nada se desecha con la regeneración y el aprovechamiento máximo de todos los recursos.
Principios de la economía circular
Para mejorar nuestro modelo productivo, la economía circular se asienta en varios principios que nos permiten ser más sostenibles con el planeta, más responsables en nuestro consumo y más activos en el cuidado de todos los miembros de la sociedad.
- El ecodiseño
Ya desde las primeras fases, el diseño juega un papel fundamental a la hora de idear los productos, elegir sus materiales, confeccionarlos y desarrollarlos de forma sostenible además de pensar en cuestiones como el destino después de su uso, con la reparación o el reciclaje, o la huella de carbono que produce su transporte.
- El cuidado de la explotación de los recursos
Uno de los ejes centrales de la economía circular es la identificación de los impactos medioambientales y sociales que puede tener la extracción así como la explotación de los recursos.
- El uso frente a la propiedad
La economía circular favorece un modelo basado en la prestación de servicios más que en la venta de propiedad, ya que permite extender la vida de un producto y hacer que varias personas puedan disfrutarlo sin que le pertenezca a ninguna.
- La ecología industrial y territorial
Como ya hemos visto, la economía circular trata de imitar la forma en la que opera la naturaleza. La ecología industrial, precisamente, emula la vida y las relaciones dentro de un ecosistema, en el que sus partes cooperan entre sí para reducir su impacto medioambiental y establecer una cadena circular.
- El consumo responsable
La economía circular también empodera a los individuos de una sociedad, dejando caer en ellos parte del peso de realizar un consumo mucho más meditado que hasta ahora y haciéndoles conocedores del impacto al realizar determinada compra.
- La reutilización y el reciclaje
A la hora de concebir la circularidad de los productos existen dos conceptos clave. Por un lado, dar una segunda vida a un producto a través de la reventa o las donaciones, a otra persona que lo necesite es fundamental en la economía circular. Por otro, cuando un producto ya no puede seguir usándose, reciclarlo permitirá crear nuevos artículos a partir de los materiales que ya se han extraído y utilizado en la elaboración del original.
¿Qué beneficios tiene la economía circular?
Según el Parlamento Europeo, la reducción en el empleo de recursos naturales y materias primas y la circularidad a través de la reutilización y el reciclaje tiene los siguientes beneficios:
- El cuidado del medioambiente: la economía circular ralentiza “el uso de recursos naturales, reducirían la alteración del paisaje y el hábitat y ayudarían a limitar la pérdida de biodiversidad”. También supone la disminución de las emisiones anuales totales de los gases de efecto invernadero.
- Una menor dependencia de las materias primas: en el modelo lineal, con una población mundial cada vez más numerosa, necesitamos más materias primas y recursos. Sin embargo, estos son finitos, por lo que si no cambiamos el modelo lineal nos dirigiremos al colapso.
- La creación de empleo y riqueza: de acuerdo con las predicciones de este organismo, la transición ecológica prevé la creación de 700.000 puestos de trabajo para 2030, solo en la Unión Europea. Además, la innovación y el rediseño tendrán una incidencia directa en otros sectores de la economía que también podrán beneficiarse de estos avances, lo que supondrá, a su vez, un ahorro en el bolsillo de los consumidores.
¿Por qué es importante cambiar a una economía circular en las empresas?
Cada vez son más las empresas que se quieren sumar a la transición hacia una economía más verde y sostenible y, en esto, la circularidad es el futuro. Las políticas de Responsabilidad Social Corporativa y las estrategias de Sostenibilidad van cobrando relevancia a medida que las empresas aceptan su papel como agentes esenciales del cambio.
Gracias a esto, muchos negocios y empresas con la economía circular pueden ver cómo son mucho más competitivos frente a otras opciones del mercado. Al optimizar la gestión de los residuos, reutilizar y reciclar al máximo, los costes se reducen, lo que puede traducirse en precios más bajos que otros competidores.
Ser más sostenibles también contribuye a contar con una mejor imagen de marca entre los consumidores, que cada vez son más exigentes con sus decisiones de compra.
Además, adoptar este tipo de medidas desde una empresa no solo servirá para anticiparse a una legislación que, a todas luces se encamina hacia la economía circular, sino que también actuará como pasaporte a otros mercados nuevos desde una posición privilegiada.
Primeros pasos para adaptar tu empresa a un modelo circular
Para dar el salto de la linealidad a la circularidad, las empresas tienen que esforzarse en algunos pasos previos que les permitan ponerse en marcha, rumbo a un nuevo modelo productivo.
Algunos de ellos son:
- Analizar la situación actual, su huella ecológica, su impacto medioambiental, para conocer los riesgos a los que se hace frente y las fortalezas con las que se cuenta.
- Mostrar un compromiso fuerte con la economía circular, elaborando políticas internas específicas que engloben a todos los departamentos de la empresa así como los indicadores y el modo de realizar un exhaustivo seguimiento de las mismas.
- Idear una hoja de ruta que indique el camino a seguir y los objetivos a cumplir por el camino, con los tiempos para llevarlos a cabo.
- Colaborar con partners y otros agentes interesantes con los que se comparta una agenda de sostenibilidad.
Modelos de negocio circulares que puedes implementar en tu empresa
La economía circular ya es una realidad en muchas ideas de negocio que hoy disfrutan de un merecido éxito y una gran popularidad.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, estos son algunos de los modelos que más están triunfando en la actualidad y que sirven de ejemplos de economía circular para empresas:
- Modelos de suministro circular, que evitan recursos totalmente nuevos y los sustituyen con materiales renovables o recuperados.
- Modelos de recuperación de recursos, que emplean la tecnología para rescatar el valor de un producto y utilizarlo en el siguiente ciclo.
- Modelos que prolongan la vida útil del producto, a través de su reparación y la actualización.
- Modelos de economía colaborativa en los que se comparten los bienes y productos y, por lo tanto, también los gastos.
- Modelos de product-as-a-service, en los que el consumidor puede utilizar por un tiempo limitado un producto, sin obtener su propiedad.
Desde las empresas de carsharing a ideas que evitan el desperdicio, el futuro de la realidad empresarial pasa por la transición ecológica y la responsabilidad de las compañías con un nuevo modelo económico más sostenible.