Edificios sostenibles: el nuevo paradigma ‘verde’ del sector inmobiliario
La sostenibilidad es un elemento cada vez más importante en los proyectos urbanísticos. De hecho, la legislación de muchos países occidentales, entre los cuales se encuentra España, ya prevé políticas para reducir el impacto de la construcción sobre el medioambiente, con construcciones de nuevos edificios sostenibles.
Por eso, el sector inmobiliario se encamina hacia un punto de no retorno. La arquitectura tradicional dará paso a un tipo de edificación mucho más respetuosa con el entorno, tendencia que ya está teniendo mucha acogida y relevancia en los proyectos de construcción. Un nuevo paradigma ‘verde’ dentro del sector inmobiliario que todo apunta a que será el dominante a medio plazo.
¿Qué se entiende por edificio sostenible?
La arquitectura verde aboga por un tipo de construcción que busca optimizar los recursos naturales en los sistemas de edificación con el objetivo de minimizar el impacto sobre el medioambiente y sus habitantes. En general, los edificios sostenibles deben cumplir con una serie de características:
- Son eficientes y optimizan el uso de energía buscando, además, su reutilización. De hecho, deben emplear en la medida de lo posible energías renovables que no generen emisiones contaminantes.
- Están construidos de tal forma que se aprovecha al máximo la luz solar y la ventilación natural para evitar el uso de instrumentos artificiales que consuman energía.
- Tienen que estar asentados sobre un ecosistema adecuado con el que no interfieran.
- La arquitectura sostenible fomenta el uso de materiales reciclables y respetuosos con el medioambiente que alarguen la vida útil del edificio y contaminen menos.
- Cuentan con una estética cuidada y adaptada al entorno en el que se ubican.
En general, para que un edificio sea sostenible, es fundamental conocer el uso que realiza de la energía. Por eso, cualquier construcción puede mejorar su sostenibilidad simplemente modificando sus sistemas de aislamiento térmico o instalando equipos de generación de energía limpia que alimenten la totalidad o parte del consumo del hogar.
Las principales certificaciones que acreditan los edificios sostenibles
La fulgurante transformación del sector de la construcción está teniendo su reflejo en la aparición de nuevos sellos de evaluación y certificación en materia de sostenibilidad de los edificios. Entre los principales sellos, tanto de nuestro país y como del mundo, se encuentran el Breeam, Verde y DGNB, entre otros.
Breeam
Es uno de los sistemas de evaluación y certificación de edificios más conocidos y prestigiosos del mundo. Creado en 1988 a través de BRE Trust, incluye las siguientes categorías: gestión, salud y bienestar, energía, transporte, agua, materiales, residuos, suelo y ecología, contaminación e innovación.
Cada una de ellas integra una serie de objetivos que, en caso de que el edificio los alcance, otorgan una cierta cantidad de créditos de los que dependerá la calificación final. En España, se han registrado 306 edificios y 816 certificados en 2020.
Verde
Verde es el acrónimo de Valoración de Eficiencia de Referencia De Edificios. Desarrollada por el Comité Técnico GBC en colaboración con el Grupo de Investigación ABIO-UPM, es una certificación que evalúa la sostenibilidad de un edificio en sus diferentes fases: prediseño, diseño y construcción.
Existen tres esquemas de Verde en función del uso del edificio: Verde Ne Residencial y oficinas, Verde Ne Equipamiento y Verde Ne Unifamiliar, Verde Rh Residencial y Verde Rh Equipamiento, y el valor final de la evaluación se obtiene como ponderación de los impactos reducidos en comparación al edificio de referencia.
DGNB
Certificación de origen alemán, el sistema DGNB es un sistema de evaluación y certificación de la sostenibilidad que contempla aspectos ambientales, económicos y socioculturales de los edificios.
Existen diferentes versiones según la fase de construcción del edificio y diferentes clasificaciones de acuerdo al grado de cumplimiento de los criterios que define esta certificación: oro, plata y platino.
Los fondos europeos de ayuda al mercado inmobiliario: hacia una arquitectura más sostenible
Los fondos europeos van a incidir en la renovación completa del parqué inmobiliario español con el fin de mejorar su eficiencia energética y su sostenibilidad. Según el informe ‘El sector residencial y la financiación en la ERESEE 2020’, publicado por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, el 60% de las viviendas españolas son anteriores a la primera normativa sobre eficiencia energética y, en consecuencia, deben ser renovadas para mejorar su sostenibilidad. En la actualidad, los edificios emiten el 36% de la contaminación con gases de efecto invernadero y son responsables del 40% del consumo energético total.
Por ello, el Gobierno anunció que, dentro de los fondos de recuperación europeos, se dedicarán 7320 millones de euros al sector de la construcción y 5320 millones de euros serán para el plan de rehabilitación y regeneración urbana, que persigue la renovación de barrios enteros y la actualización de 500 000 viviendas en los próximos tres años.
Pero no acaba aquí la cosa, porque la Comisión Europea ya ha fijado como una de sus prioridades la rehabilitación energética de las principales infraestructuras de vivienda y transporte para los próximos años, mientras que el Gobierno español aprobó en agosto de 2020 el Programa para la Rehabilitación Energética de Edificios. Todo ello con el firme compromiso de aumentar el número de edificios sostenibles y, en consecuencia, mejorar el impacto climático de la construcción.
