Ideas de éxito: Too Good To Go
En 2016, un grupo de amigos en Copenhague fueron a cenar a un bufé y se encontraron con que, al final de la noche, los camareros tiraban toda la comida sobrante. El asunto les impactó, empezaron a investigar y descubrieron que más de un tercio de la comida que se produce en el mundo finalmente se desperdicia.
Hambre y desperdicio conviven sin razón. Las cifras dan vértigo. A nivel mundial, se malgastan 2500 millones de toneladas de comida cada año, mientras más de 800 millones de personas pasan hambre. Un despilfarro que cuesta 1,2 billones de dólares anuales, casi el PIB de España. Además, el desperdicio alimentario es causante del 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
En este país, se calcula que más de seis millones de personas (un 13% de los hogares) no ingieren la cantidad necesaria de alimentos para un desarrollo normal. Pero la sombra del hambre no impide que en España se tiren a la basura hasta ocho millones de toneladas de alimentos cada año.
Afortunadamente el shock de los amigos daneses no quedó ahí. Y de aquella experiencia nació un proyecto empresarial destinado a hacer el mundo más justo y el planeta más sostenible. Se trata de Too Good To Go, una aplicación móvil que conecta restaurantes y establecimientos de alimentación con usuarios que pueden estar interesados en la comida sobrante que cada día generan estos locales.
Marie Lindström es la directora general de Too Good To Go España desde septiembre del año pasado. Ella explica cómo funciona el sistema: “Hay unos packs sorpresa que pueden ser seleccionados por los usuarios y el contenido de estas bolsas va a depender de lo que le queda al establecimiento al final del día. Les damos una segunda oportunidad al alimento. Lo compran a través de la aplicación y lo pueden recoger en el establecimiento”.
Seis millones de usuarios y 16 000 establecimientos en España
Con el paso del tiempo, Too Good To Go se ha ido extendiendo por toda Europa y hoy está presente en 17 países, tiene más de 70 millones de usuarios, cuenta con más de 134.000 establecimientos y más de 200 millones de packs han sido salvados. Solo en España, donde está presente desde 2018, ya son más de seis millones los usuarios de la aplicación y ha alcanzado acuerdos con nada menos que 16 000 establecimientos. Como resultado, aquí en nuestro país ha logrado salvar 12 millones de packs sorpresa de comida.
Los comienzos en España
Para Too Good To Go el mayor reto fue crear una comunidad de usuarios y establecimientos con la que arrancar. En este sentido, Marie Lindström rememora los primeros momentos en España. “Las personas que estuvieron con Too Good To Go al principio se dedicaron a patear las calles de Madrid para encontrar establecimientos que se unieran a nuestra causa. Al principio fue difícil. El primer restaurante que se subió a la plataforma está en el barrio de Chueca, en Madrid”.
A pesar de las dificultades iniciales, la acogida de la aplicación en España fue positiva. “La aplicación es win-win-win. A través de ella gana el consumidor porque accede a packs de alimentos por un precio muy bueno. Además, gana el establecimiento, porque evita tirar comida al final del día y puede hacer una pequeña ganancia, y gana el planeta, porque estamos haciendo algo bien”.
También más allá de las grandes ciudades
Marie Lindström aclara que, contrariamente a lo que pudiera parecer, Too Good To Go no es una aplicación que solo funcione en grandes ciudades. “Es verdad que arrancamos en Madrid y Barcelona, pero la app está hecha para funcionar en cualquier sitio, y hemos ido creciendo y hoy estamos presentes en toda España”, asegura.
Además, afirma que el objetivo del equipo que compone Too Good to Go es inspirar a toda la sociedad a la hora de tomar la iniciativa contra el desperdicio de alimentos. “Queremos contribuir a conseguir el objetivo de la ONU de reducir a la mitad el desperdicio de alimentos per cápita en el mundo en 2030”. El fin social es esencial en el ADN de la compañía danesa. “Todo lo que hacemos aquí tiene un impacto positivo a nivel social. La responsabilidad social corporativa forma parte de todo lo que trabajamos”, concluye Marie Lindström.