PERTE vehículo eléctrico: qué es, para qué sirve y cómo acceder
El pasado mes de julio, el Gobierno dio luz verde al primero de los PERTE, el que tiene al coche eléctrico como beneficiario. La red de infraestructuras y la cuota de mercado de los vehículos sin emisiones son aún limitadas, pero se trata de un producto que goza de una popularidad creciente, lo que le da a España la oportunidad de posicionarse como referente en uno de los sectores del futuro. Para ello se ha movilizado un multimillonario ‘plan maestro’ en sintonía con sus homólogos, como el PERTE de microchips o el PERTE naval.
¿Qué es el PERTE del vehículo eléctrico?
Los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) se enmarcan en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia articulado por España para acceder al programa europeo de estímulo económico NextGenerationEU. Se trata de iniciativas de colaboración público-privada cuya meta es propulsar aquellas ideas o productos con capacidad para contribuir de forma decisiva al desestancamiento y avance de la Economía.
El PERTE del vehículo eléctrico (o PERTE VEC) se centra en dar estímulo a la fabricación de coches eléctricos y conectados en nuestro país, así como fortalecer el valor añadido de este sector y, por extensión, el de la automoción española en su conjunto y las áreas productivas asociadas a ella. El objetivo a medio-largo plazo es hacer de España el núcleo de la electromovilidad a nivel europeo.
La cantidad total presupuestada contempla una inversión de más de 24.000 millones de euros en el periodo 2021-2023, con una contribución del sector público de 4.295 millones de euros y una inversión privada de 19.714 millones de euros.
¿Para qué sirve el PERTE del vehículo eléctrico y conectado?
Ejes principales
Las líneas principales de actuación del PERTE VEC se enfocan en los siguientes aspectos:
- Desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos y conectados a la red, así como en la producción de elementos clave para dichos vehículos, como las baterías y el hidrógeno renovable.
- Aumentar la independencia industrial de España dentro del marco europeo, para evitar desabastecimiento de bienes esenciales como el sufrido durante la crisis de suministros.
- Acercarse a los objetivos de neutralidad climática adquiridos por la Unión Europea para 2050. La neutralidad climática se conseguirá cuando la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos sea igual o menor a la que se elimina por distintos medios.
- Posicionar a España como uno de los grandes centros de transformación sostenible del sector de la automoción a nivel global.
- La evolución del marco regulatorio del sector de la automoción, en línea con los objetivos de sostenibilidad fijados para 2050.
El plan tiene, por tanto, tres grandes vectores: el estratégico-industrial, el financiero y el regulatorio; todos ellos con un nexo en común, la sostenibilidad. Tal y como explica la memoria del proyecto, el propósito del mismo pasa por movilizar a los actores de la cadena de valor de la industria de la automoción española, de tal forma que el tejido industrial posea las capacidades e infraestructuras necesarias para fabricar un vehículo eléctrico y conectado de forma competitiva.
Medidas y actuaciones
El paquete de actuaciones enmarcado en el PERTE VEC está estructurado de forma comparable a la de otros proyectos estratégicos de la misma índole. Una parte del presupuesto se dedica a los procesos de transformación del tejido productivo; mientras que el resto se destina a las medidas facilitadoras enfocadas a la creación de nuevas soluciones de movilidad sostenible y el desarrollo del vehículo eléctrico.
¿Quién puede acceder al PERTE del vehículo eléctrico?
El Plan Estratégico establece una serie de requisitos para el acceso a las líneas de apoyo a los proyectos transformadores de la cadena de valor del vehículo eléctrico.
Proyectos transformadores
Las entidades interesadas en acceder a las convocatorias de ayudas de la Línea de actuación integral para el desarrollo y la fabricación del VEC tendrán la obligación de constituirse como una agrupación de empresas, de conformidad con los términos establecidos en el artículo 11.3 de la Ley General de Subvenciones y su normativa accesoria.
Deberán, además, cumplir los siguientes requisitos adicionales:
- Estar organizada en torno al sector industrial de automoción, con una composición, como mínimo, de cinco empresas.
- La entidad debe estar integrada, al menos, por un 40% de pymes participantes.
- Contar con la colaboración de, al menos, una entidad que tenga la capacidad suficiente para la realización de las actividades de I+D+i que incorpore el proyecto matriz.
- Tener implantación en al menos dos autonomías.
Para acceder al resto de medidas transformadoras, será necesario formar parte de una de estas agrupaciones empresariales o bien tener la consideración de pyme según lo establecido en la normativa europea.
Medidas facilitadoras
En cuanto a los programas de apoyo en el ámbito de las medidas facilitadoras, se articulan en torno a diversas convocatorias de ayudas de las que se pueden beneficiar tanto particulares como autónomos, pequeñas y medianas empresas y administraciones públicas, según el enfoque de la medida en cuestión.
Cada una de estas convocatorias cuenta con su propia batería de requisitos y filtros. Es el caso de, por ejemplo, el programa MOVES III, dirigido a la adquisición de vehículos eléctricos y de infraestructura de recarga. Esta iniciativa ofrece, además de financiación para la compra de coches y motos eléctricos, ayudas económicas para la instalación de infraestructura de recarga. La cuantía de estas ayudas difiere según el solicitante sea una gran empresa (40%), una compañía mediana (50%), una empresa pequeña (60%) o un autónomo, particular o administración pública (80%).