Retribución flexible: ¿qué es y cómo funciona?
A la hora de remunerar el trabajo de los empleados, existen varias opciones para hacer esta compensación más atractiva tanto para ellos como para la empresa. Es el caso de la retribución flexible, un sistema que permite a los trabajadores aumentar su salario neto sin que ello suponga un coste adicional para la compañía.
Además, este modelo ofrece a los empleados acceso a bienes y servicios a un precio más reducido que el del mercado (lo explicaremos más adelante), lo que se traduce en una compensación que va más allá del dinero recibido en cuenta. Como resultado, mejora la percepción de la empresa y el compromiso de los trabajadores con ella.
A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la retribución flexible.
Índice:
- ¿Qué es la retribución flexible?
- ¿Cómo funciona la retribución flexible?
- Ejemplos de retribución flexible
- Ventajas de la retribución flexible para empresas
- Ventajas de la retribución flexible para empleados
- Diferencia entre retribución flexible y salario en especie
- ¿Cómo se reflejan en la nómina del trabajador?
¿Qué es la retribución flexible?
La retribución flexible es un sistema de remuneración voluntario que permite al empleado distribuir el cobro de su salario bruto entre una parte el dinero que recibe en su cuenta y otra el consumo de productos o servicios que contrata a través de la empresa, como cheques restaurante, transporte o gastos de guardería.
De esta forma, y como estos beneficios están exentos de IRPF, la base imponible del trabajador se reduce y, en consecuencia, su salario neto al finalizar el año es mayor. Para la empresa, este sistema también conlleva ventajas fiscales y le permite ofrecer mejoras salariales sin incrementar la carga económica.
La retribución flexible está regulada en la legislación española mediante la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, y el Real Decreto 439/2007, de 30 de marzo.
¿Cómo funciona la retribución flexible?
La empresa puede ofrecer la retribución flexible a sus empleados, pero son ellos quienes deciden, de manera voluntaria e individual, si la aceptan y qué beneficios quieren obtener con ella. Así, en un grupo de tres trabajadores, el primero puede recibir únicamente remuneración monetaria, el segundo solicitar una retribución flexible con cheques para restaurantes y transporte, y, el tercero, acceder a este sistema para pagar con su salario un seguro de salud.
El funcionamiento de la retribución flexible es sencillo:
- El trabajador recibe en su nómina el salario bruto establecido, sin cambios.
- Sin embargo, solo ingresa una parte en dinero. La otra la destina al pago de los beneficios que ha acordado con la empresa, como la cuota del gimnasio o un curso formativo.
- Al hacer la declaración de la renta, la cuantía del salario destinada a esos beneficios no cuenta como rendimientos del trabajo, por lo que la base imponible para el cálculo del IRPF, que determina cuánto se debe pagar por este impuesto, es menor.
Aunque es el trabajador quien decide a qué beneficios accede mediante la retribución flexible, no puede destinar más del 30% de su salario bruto anual al pago de estos bienes y servicios.
Ejemplos de retribución flexible
La retribución flexible está concebida como un sistema para atraer y fidelizar talento, que puede ayudar, entre otras cosas, a conciliar la vida laboral y personal del trabajador. Estos son algunos ejemplos de los beneficios a los que el empleado puede destinar una parte de su salario bruto.
Cheque guardería
Dedicar una parte del salario mensual al pago de los gastos en guardería es una de las formas más habituales de retribución flexible, ya que favorece esa conciliación que necesitan muchos profesionales con hijos en edad preescolar. El cheque guardería puede servir para abonar la matrícula, el comedor, los gastos en material escolar, etc.
Seguros privados para empleados
Los seguros privados son otro de los servicios habituales en la retribución flexible. En lugar de contratarlos por su cuenta, al hacerlo a través de la empresa los trabajadores pueden conseguir mejores condiciones y coberturas adaptadas a sus necesidades.
Cheques restaurante
Mediante la retribución flexible también se pueden abonar comidas, cenas y otras consumiciones en restaurantes y cafeterías, siempre y cuando no estén motivadas por causas laborales. Es decir, este cheque restaurante podría utilizarse para pagar una cena que el trabajador celebre el fin de semana, pero no para una comida que tenga que hacer en otra ciudad porque ha tenido que trasladarse allí para una reunión de la empresa.
Transporte
Los gastos en transporte, ya sea en autobús, tren u otros medios, también suelen incluirse en la retribución flexible. Entre los beneficios también puede figurar la adquisición de un vehículo propio, siempre y cuando su uso sea personal, no profesional. Este concepto suelen ofrecerlo, sobre todo, las empresas que tienen sus sedes alejadas del centro urbano y a las que hay que acceder en algún modo de transporte.
Gimnasio
Otro gasto habitual que se puede pagar mediante la retribución flexible es la cuota del gimnasio. Para la empresa, puede ser sencillo asociarse con determinados centros deportivos, mientras que el trabajador puede obtener un precio más económico por utilizar estas instalaciones que el que tendría que pagar si se apuntara por su cuenta.
Ventajas de la retribución flexible para empresas
La retribución flexible es un mecanismo que ofrece ciertas ventajas para las empresas. Por ejemplo:
Ahorro en costes laborales
El coste que un trabajador supone para la empresa puede ser menor si este opta por recibir su salario mediante retribución flexible, ya que la compañía puede beneficiarse de precios reducidos al contratar el mismo servicio para un grupo numeroso de empleados. Además, con este sistema retributivo, la percepción que el trabajador tiene de su salario es que este es mayor, cuando el coste laboral para la empresa sigue siendo el mismo, o incluso más pequeño.
Exenciones fiscales
Todos los productos y servicios incluidos en la retribución flexible cotizan a la Seguridad Social. Sin embargo, su coste puede deducirse del pago del impuesto de sociedades.
Atracción y retención de talento
Con la retribución flexible, las empresas no solo contribuyen a que el poder adquisitivo de sus empleados sea mayor, sino que también muestran un interés y preocupación por su bienestar que es clave para captar y retener talento.
Mayor productividad
La retribución flexible contribuye a generar un buen clima laboral y a que los trabajadores se sientan más implicados con la empresa, lo que mejora su productividad.
Ventajas de la retribución flexible para empleados
Los empleados también pueden beneficiarse de la retribución flexible de varias maneras, por ejemplo:
Ahorro fiscal
La parte del salario que se destina al consumo de los bienes y productos de la retribución flexible está exenta de IRPF, por lo que, al cabo del año, el salario neto del trabajador es mayor y, con él, su poder adquisitivo.
Beneficios sociales
Poder cobrar una parte del salario en especie supone poder acceder a servicios como guardería, transporte o seguros sin pagar más por ellos.
Adaptación a las necesidades
La retribución flexible es un sistema voluntario y, como tal, se adapta a las necesidades de cada trabajador. Habrá quien quiera obtener mediante este sistema un seguro o un curso formativo, y quien prefiera, por ejemplo, un cheque para gastar en restaurantes o el acceso a un gimnasio. Siempre y cuando el porcentaje del salario bruto anual que se cobra en especie no supere el 30%, las posibilidades son amplias.
Diferencia entre retribución flexible y salario en especie
Aunque son conceptos parecidos, la retribución flexible y el salario en especie no son lo mismo. La retribución flexible es un sistema de compensación que elige el trabajador para distribuir su salario entre diferentes beneficios, mientras que cuando hablamos de salario en especie nos referimos a los bienes y servicios que ofrece la empresa de manera fija para todos sus trabajadores, como parte del paquete retributivo.
¿Cómo se reflejan en la nómina del trabajador?
Los beneficios a los que accede el trabajador mediante la retribución flexible se reflejan en la nómina con su cuantía correspondiente como un concepto más que se añade al salario bruto y que, por tanto, cotiza a la Seguridad Social. Sin embargo, no figuran en el salario neto, ya que se disfrutan en especie.
